Curiosidades sobre los astros, propuestas de observaciones sencillas, aspectos cotidianos pero poco conocidos, todo ello con un enfoque didáctico.

Mostrando entradas con la etiqueta Estrellas fugaces. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Estrellas fugaces. Mostrar todas las entradas

jueves, 12 de diciembre de 2019

Dos lluvias de meteoros muy destacadas y poco observadas

Las lluvias de estrellas fugaces, o meteoros, son unos de los fenómenos astronómicos de los que más se suele hablar tanto en los medios de comunicación como por la gente en general. Pero normalmente son las Perseidas (las “lágrimas de San Lorenzo” de agosto), las más nombradas y las más observadas. Es lógico porque ocurren en un periodo de vacaciones para gran parte de la población, y en época de buena temperatura en el hemisferio norte que permite pasar horas tumbado mirando el cielo.
Trayectoria de una espectacular perseida que pude ver y capturar el 13 de agosto de este año
Sin embargo no son las mejores. Precisamente ahora, con un intervalo de 3 semanas van a poderse observar otras dos lluvias, que habitualmente producen mayor número de meteoros que la famosa lluvia de agosto. Ya están aquí las Gemínidas, y aún en periodo navideño llegarán las Cuadrántidas. Para muchos, éstas si, las dos mejores del año.

Pero ambas tienen el problema del frío. A ver quien se atreve con estas temperaturas a tumbarse en el suelo al raso y quedarse observando durante un buen rato.
Podría pensarse que si a los habitantes del hemisferio Norte nos pilla mal, en el Sur, con el comienzo del verano será ideal. Pero no. Tal como se puede ver en los gráficos que aparecen en el anexo, los meteoros “vienen” del norte, según la trayectoria del astro generador. (Los astrónomos con un lenguaje técnico y poco comprensible por el público decimos que sus radiantes tienen una alta declinación Norte, como si esa fuera la clave en vez de la consecuencia) y por ello desde el hemisferio Sur se verán muchos menos.

Pero si eres una de esas personas que no se arredran ante el frío y están dispuestas a todo para ver un buen espectáculo, antes de seguir debo darte los datos concretos que te interesan: Aunque los días cercanos también se verán, el mejor momento para observar las Gemínidas este año 2019 será la noche del 13 al 14 de diciembre, y las Cuadrántidas la noche del 3 al 4 de enero ya de madrugada (quizás tambien la siguiente según alguna predicción). Este año tenemos suerte, porque en ambos casos se trata de la noche del viernes al sábado, y la mayoría de la gente puede acostarse tarde,  después del espectáculo, porque no tiene luego que ir a trabajar.


El factor de la fase lunar y la molestia de su luz no nos ayudará con las Gemínidas porque al estar menguando pero casi llena nos obligará a comenzar observar al principio de la noche, que si bien a muchos les parecerá el momento más cómodo, nos dificultará la observación en las horas en que teóricamente podrían verse mayor número de meteoros, aunque el gran brillo de muchos de ellos permitiría verlos aún con la Luna casi llena y alta en el cielo.

Afortunadamente el otro caso es diferente:

viernes, 16 de agosto de 2019

Mi noche de las perseidas

Perseidas 2019, objetivo cumplido

Como se ha dicho muchas veces, uno de los alicientes astronómicos del verano para el gran público es la lluvia de estrellas fugaces (técnicamente meteoros) llamada "las Perseidas" o "Las lágrimas de San Lorenzo". Ya hablé de ello en el artículo anterior, y hoy recojo los resultados de mi observación.

Al igual que el mes pasado con ocasión del eclipse de Luna, como las condiciones atmosféricas de mi lugar de vacaciones no eran nada propicias, ayudado por Meteoblue y el navegador de mi coche intenté encontrar el lugar adecuado a la hora adecuada para la observación. Bueno, al final estuve un poco perdido, y con prisas porque la Luna ya se había ocultado y no encontraba un sitio suficientemente oscuro, pero sobre las 5 y cuarto después de recorrer unos cuantos kilómetros paré en un lugar aceptable, monté la cámara en su trípode y me eché hacia atrás sobre el capó del coche, porque el suelo no me inspiraba mucha confianza.

En 18 minutos (de 5:18 a 5:36) contabilicé 15 meteoros (por supuesto cubriendo solo una parte del cielo, en una postura no demasiado adecuada). Breve descanso para picar algo y desentumecer cuello y espalda, y en otros 15 minutos (de 5:39 a 5:54) vi otros 10. Más tarde, ya sin cronometrar y más relajado otros 4 más, entre ellos el más espectacular de la noche, a las 6:02.

La suerte se alió conmigo y ese extrordinario meteoro, cuya imagen puede verse aquí, tuvo la deferencia de exhibirse centrado en el campo hacia donde estaba dirigida mi cámara, y su buena puntería casi le lleva a incidir en la galaxia  M31.


Ya con el cielo anunciando el alba seguí mirando para arriba hasta las 6 y cuarto con la cosecha disminuyendo drásticamente como era lógico.
Había pasado apenas una hora, mi observación más breve de Perseidas de los últimos años, pero una hora muy productiva.

Las fotos

Aunque no de manera continua, durante varias fases de ese tiempo iba disparando mi cámara en sucesivas tomas de 20 segundos, algunas de las cuales voy intercalando con el texto, a continuación:

miércoles, 7 de agosto de 2019

Un buen año para unas Perseidas "diferentes" y algo más

Ya se acerca el fenómeno celeste más conocido y más esperado por el público en general: la lluvia de estrellas fugaces Perseidas o “Las lágrimas de San Lorenzo” como popularmente se conocen en muchos lugares; y ya mucha gente va preguntando cuándo y cómo se verán este año. 
En realidad esta lluvia es muy amplia en el tiempo y ya han empezado a verse algunas Perseidas dispersas, pero como en realidad la pregunta suele ser sobre el momento en que más se verán, la respuesta es la madrugada del día 13 de agosto. Y si no hay nubes, merecerá la pena poner el despertador, porque hay algo más.




viernes, 10 de agosto de 2018

Las estrellas fugaces son para el verano


Parafraseando a la conocida obra teatral en cuyo título se mencionaba a las bicicletas, hay que decir que las estrellas también, y sobre todo las estrellas fugaces, son para el verano.

En el Aula de Astronomía donde trabajo, cuando acude algún grupo de adultos aunque sea gente no versada en el tema, siempre hay alguien que  menciona o pregunta por las perseidas, o más frecuentemente “las lágrimas de San Lorenzo” o simplemente por las estrellas fugaces de los veranos.

Les resulta sorprendente oír que no son estrellas ni nada parecido, sino solo pequeños granos de polvo o roca que llamamos meteoroides, procedentes de un cometa, que se queman en la atmósfera ionizándola y produciendo una luz denominada meteoro. Y que hay un motivo claro por el que siempre aparecen por las mismas fechas, precisamente cuando la Tierra pasa por las proximidades de la órbita del cometa.
Imagen publicada por lasexta.com en un artículo sobre las perseidas de este año, que recoge unos cuantos ¿meteoros?
Yo mismo, recuerdo que cuando estaba empezando a adentrarme a este mundo de la astronomía leí un artículo en una revista de información general hablando de esta lluvia, donde se anunciaba como una especie de castillo de fuegos artificiales, y me quedé entusiasmado y ansioso porque llegara la fecha. Había visto alguna estrella fugaz, incluso sentado en algún banco en medio del pueblo donde pasaba los veranos, en aquella época en que la iluminación de las calles era muy precaria (un astrónomo aficionado diría estupenda). Pero eso de que una noche se pusieran de acuerdo y aparecieran tantas, para mí era una novedad.

viernes, 11 de agosto de 2017

Habrá que hablar de las perseidas

Se está anunciando por todas partes y ya está aquí la lluvia de estrellas fugaces más esperada del año en el hemisferio Norte: las Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo.
Pequeñas partículas que se desprendieron del cometa Swift Tuttle y que estos días se desintegran en la atmósfera terrestre dejándonos ese rastro luminoso que los astrónomos llamamos meteoros y que la tradición invita a pedir un deseo.

Parece que es obligatorio hablar del tema y hasta tal punto, que incluso le sacan chistes que solo tienen sentido por todo lo que se oye en todas partes sobre ellas.

jueves, 27 de julio de 2017

¿Más lluvias de estrellas? No gracias

Se aproxima el mes de agosto, y como todos los veranos por esas fechas habrá algo de lo que todos los medios de comunicación se harán eco, y la gente preguntará: Las estrellas fugaces, las famosas lágrimas de San Lorenzo, técnicamente  la lluvia de meteros de las Perseidas, de la que ya hablé el año pasado.

Realmente algunas lluvias de meteoros son un bonito espectáculo celeste aunque decepcionante para la mayoría de la gente que intenta verlo por primera vez porque ha oído hablar mucho de ello pero no sabe lo que puede ver, y espera mucho más. 
Por lo que se cuenta y las imágenes que se suelen poner, parece que todo el cielo va a verse surcado por puntos luminosos que se mueven rápidamente; pero con mucha suerte si uno no se aleja mucho de su lugar de residencia y se sitúa en un lugar muy oscuro (la mayoría de la población vive en zonas muy iluminadas), después de estar mirando hacia arriba un buen rato podría ver solo algún que otro meteoro solitario.

Foto: epod.usra.edu / Wally Pacholka
Pero como parece que estas noticias tienen mucha aceptación, cada vez se anuncian más y  más lluvias de estrellas y es muy probable que, sin esperar a las famosas Perseidas, estos días de finales de julio oigas hablar de las Delta Acuáridas.
Un anuncio de las esta lluvia, el pasado año.
No hagas caso.

viernes, 5 de agosto de 2016

El espectáculo de todos los veranos ya está aquí

La última noche del mes de julio vi la primera perseida de la temporada y ya he tenido varias opciones más para pedir deseos, como es costumbre cada vez que se ve una estrella fugaz. Aunque todavía faltan unos días para el momento en que se producirá el máximo de actividad, conviene ir dando pautas y observando la previa del espectáculo.
El 2 de agosto una débil estrella fugaz de otra lluvia se asoma tímidamente por arriba a la derecha al escenario donde actúan de Marte y Saturno, ejerciendo de telonera de las Perseidas. Imagen tomada en Araúzo de Torre.
Casi siempre que hablo de astronomía con personas no versadas en el tema, me preguntan sobre las estrellas fugaces  y me cuentan sus experiencias cuando las han visto, siempre en los veranos. Y cuando se habla de los fenómenos astronómicos que ocurrirán en el verano, se suele empezar por citar las “lágrimas de San Lorenzo” nombre popular con el que se suele conocer a  las Perseidas y que explico a continuación.

jueves, 12 de noviembre de 2015

Las Leónidas, una lluvia excepcional

Puede parecer increíble, cómo algo tan pequeño (menos de 1 centímetro) que está tan lejos (a unos 100 kilómetros) pueda producir un efecto tan llamativo, y no solo eso, tan especial que haya creado la tradición de pedir un deseo al verlo. Son las estrellas fugaces.

Se producen cuando algo parecido a un grano de arena proveniente del espacio, normalmente un pequeñísimo resto de un cometa, entra en la atmósfera, la ioniza y da la impresión de que es una estrella que cae.