Curiosidades sobre los astros, propuestas de observaciones sencillas, aspectos cotidianos pero poco conocidos, todo ello con un enfoque didáctico.

miércoles, 4 de octubre de 2017

Mirando un punto azul pálido

En el último post que publiqué antes del índice puse esta imagen:


Créditos: Nasa/JPL

Sin embargo no mencioné la razón por la que se ha hecho famosa, que no ha sido tanto la espectacular visión de los anillos de Saturno a contraluz, que desde aquí nunca se pueden  observar, como algo que apenas se intuye y por eso lo he señalado con una flecha en la imagen, que es nuestro planeta, un débil punto azul pálido, una cosita de nada.



Ya hace muchos años que se obtuvo la primera imagen de la Tierra desde el espacio, desde mucho más cerca, y alguien quiso destacar el hecho de que lo que más le llamaba la atención es que no se veían las fronteras.


Desde el espacio no se ven las fronteras

Muchas veces se ha dicho que sí pueden verse: que la Gran Muralla China es la única obra artificial que se ve desde el espacio. Y no hay que olvidar que fue frontera y fue edificada para defender el imperio. Pero parece que eso no es más que un  bulo debido a que alguien ha hecho cuentas pero se olvidó de algo importante: Teniendo en cuenta su gran longitud, debería verse, pero como realmente es muy estrecha, no se puede distinguir. Cualquier plaza de cualquier ciudad o cualquier recinto deportivo sería más visible desde el espacio que la frontera marcada por la muralla china.

Pero hoy no quiero extenderme sobre esas cosas, que solo son una excusa, sino más bien quiero recordar a alguien a quien ya he citado un par de veces: El principito de Saint Exupery. 



Conozco personas que después de leer El Principito se aficionaron a la astronomía, y otras que, ya con intereses en este mundo de los astros leyeron con curiosidad el libro con las historias que se desarrollan en pequeños asteroides y encontraron algo más de lo que pensaban.
Porque aunque parece un cuento para niños, tiene muchos mensajes ocultos entre líneas. 

Por ejemplo, que siempre que hay cualquier conflicto parece que hay buenos y malos. Y siempre los malos son los otros.
Para la rosa el malo es el cordero porque se la puede comer. Y para el cordero la mala es la rosa por haber fabricado esas espinas que pueden dañarle.

Aunque a veces parece que está claro quién es el malo, porque ante los ojos de cualquiera la serpiente lo es, en el fondo puede que no sea así e incluso nos ayude, como le ayudó al principito.

En la obra aparecen también otros personajes, que reflejan muchas de las arbitrariedades y absurdos de los humanos:
Todos, excepto el pobre farolero que sufre una situación absurda, provocada por quien le da la consigna, los demás actúan de manera inmovilista y no dialogante, lo que lleva a situaciones negativas que nunca se resolverán.

El rey del asteroide 325 que necesita tener súbditos a los que gobernar, sin preocuparse para nada de ellos porque que en realidad no le importan. Sabe que en realidad no pinta nada, pero quiere creerse que puede dar órdenes.

El borracho que vive en el asteroide 327, que actúa erre que erre sin saber por qué, pues metido en un círculo vicioso sin salida, olvidó el motivo.


El rey y el borracho …  y luego dicen de Julio Verne!  Pero hay más que también nos valen de ejemplos:

El vanidoso del 326, que solo quiere admiradores que le aplaudan, igualmente podría estar en esta historia. Su imagen también encaja junto con los dos anteriores.


O mi favorito, el farolero del 329, a quien ya dediqué un post, que sufre y es víctima de quien no cambia la consigna a pesar de que haya cambiado la situación.

También está el coleccionista de estrellas del asteroide 327. que ansía tener más y más. Aunque no se dice si era familia del rey, actúa como él acumulando cada vez más cosas que en realidad no necesita, y nos recuerda a tantos personajes famosos que han arruinado su vida por avaricia cuando lo tenían todo. Este no encaja mucho en la historia de hoy, pero en algo está relacionado.


La especie humana está llena de absurdos como estos personajes, y además es violenta. Lo mismo que todas las especies animales, porque necesitaba asegurar su supervivencia frente a los demás. La naturaleza nos hizo así, pero la evolución ha permitido que surjan valores como la solidaridad con los que son diferentes, nuevos modos de organizarse para que a todos nos vaya mejor, en definitiva la esperanza de que si no nos destruimos antes, seremos capaces de construir un planeta donde convivir todos en paz. Aunque sea con pasos vacilantes, con frecuentes retrocesos, pero algo vamos avanzando.

Cuando en las novelas de ciencia ficción nos invadían los marcianos, a pesar de que ellos eran los malos parece que estaban unidos, habían conseguido vivir juntos en armonía y ellos no se destruían unos a otros.

Sé que suena muy pueril y almibarado, y mucha gente pensará que así no se arregla nada, pero está claro que con la violencia o la imposición tampoco.

No hay que olvidar que estamos todos juntos en este pequeño punto azul pálido.

Cuando en aquella entrevista para la revista ASTRONOMIA y el blog ASTROMETRICO  me preguntaron “ ¿Qué noticia le gustaría dar en su blog? (un blog de astronomía) “ …    Lo tuve muy claro.


Espero que nadie se haya molestado por estas reflexiones, o decepcionado porque en este post no haya apenas contenido astronómico. Últimamente tengo poco tiempo para escribir y profundizar en mis temas, pero espero que en un futuro próximo vaya publicando más artículos en la línea de los anteriores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario