Retrogradación (2). Ares y Antares toman posiciones.

- La retrogradación de Marte

En la entrada anterior te presentaba a los dos protagonistas principales de esta historia. Aunque no es imprescindible para seguir las explicaciones, si quieres conocer mejor a estos dos astros puedes leerlo antes que éste, clicando aquí. 

Como allí se dijo, la función que Ares (Marte) y Antares (la estrella más brillante de Escorpio) están representando estas semanas en el escenario celeste nos puede ayudar a ver uno de los fenómenos que fue clave en el descubrimiento de la verdadera estructura del Sistema Solar, los movimientos reales de los planetas y la situación de la Tierra en el Universo: la retrogradación.

Esta retrogradación planetaria, fundamentalmente la de Marte, fue el origen de una auténtica revolución del conocimiento humano e incluso, según algunas opiniones, dotó a esta palabra de un nuevo significado que actualmente es su acepción más común, como se recoge al final en el anexo.

Como también se mencionó, esta retrogradación del cuarto planeta se está produciendo en estas fechas y en este caso precisamente en la constelación de Escorpio, por lo que su estrella más brillante, es la referencia ideal.

Si los observamos estas noches en el cielo podemos imaginar a Ares y Antares (su rival) como dos contendientes en un combate, tal como seguramente suponían los antiguos griegos en sus relatos mitológicos. Toman posiciones, se alejan lentamente midiendo el terreno, para después lanzarse el uno contra el otro. 

Aunque si miramos atentamente veremos que solo uno es el que se mueve, el más poderoso como sería lógico. 

El otro permanece quieto, como intentando aguantar el envite de su rival, bajo la mirada de un tercero, Cronos (que los romanos rebautizaron como Saturno) que parece hacer de juez y aunque cambia de posición ligeramente, quizás para observar mejor, sus movimientos son mucho más lentos.

Pero dejémonos de leyendas y vayamos a analizar la realidad de los astros y por qué se comportan de esa manera.

- Movimiento directo y retrógrado

Debido al movimiento de los planetas alrededor del Sol, si observamos en el cielo nocturno a cualquiera de ellos y comparamos su posición respecto a las estrellas cercanas, normalmente de día en día (o mejor se apreciará de semana en semana) les veremos situados cada vez más al Este (hacia la izquierda si lo observamos desde el hemisferio Norte o a la derecha desde el H. Sur), independientemente del movimiento diario de todo el cielo hacia el Oeste a lo largo de las horas.

Dos imágenes tomadas con algo menos de un mes de diferencia. En ese tiempo Marte se ha movido apreciablemente hacia el Este. Para que la situación de las constelaciones coincida, la segunda se tomó casi 2 horas antes, al final del crepúsculo.

Sin embargo en determinados momentos este movimiento parece detenerse y luego durante una temporada (unas cuantas semanas o meses) se les ve ir hacia atrás, retrocediendo hacia el Oeste, (visto desde el hemisferio Norte se sitúan cada vez más a la derecha respecto a las estrellas cercanas), para volver luego a moverse en el sentido habitual.

Este “extraño” movimiento hacia el Oeste respecto a las estrellas es lo que se llama retrogradación. En el anexo después del rombo se explica con detalle la situación y las causas pero no es difícil de entenderlo con un símil. Es como si yendo por una autopista de varios carriles vemos delante nuestro otro coche que avanza pero más lento que el nuestro. En el momento en que le adelantamos, nos parece que se mueve hacia atrás. De hecho en esos instantes lo vemos retroceder respecto a una referencia lejana en el horizonte, por ejemplo.

Ahora es el momento: A continuación pongo unas imágenes obtenidas desde Bilbao en las últimas semanas, donde se puede apreciar que Marte cada vez está más separado de Antares, cada vez más a su derecha.

A pesar de la contaminación lumínica de la ciudad, se pueden distinguir los protagonistas de esta historia

Las mismas imágenes recogidas sucesivamente en esta secuencia, permiten apreciar mejor el movimiento de Marte.

Puedes ser testigo de la  retrogradación hasta el 30 de junio. Queda menos de la mitad pero es el tramo más fácil de observar porque, a diferencia de lo que ya ha ocurrido y que te puedas haber perdido, ahora Marte se ve al principio de la noche en horas más “adecuadas”.

Pero habrá que seguir observando incluso después, para comprobar como Marte cambia de sentido en su trayectoria. Volverá a acercarse a Antares, e incluso la rebasará en su acometida durante la segunda quincena de agosto, formando un precioso trío con Saturno. En total tenemos casi 3 meses por delante para observar detenidamente el movimiento de Marte sobre el fondo de las estrellas.

El recorrido completo de la retrogradación, incluyendo además los periodos anteriores y posteriores a la misma, se recoge en este gráfico.

Trayectoria de Marte sobe el fondo de las estrellas. En blanco, el tramo de retrogradación que ya ha ocurrido, desde el comienzo del fenómeno (16 de abril) hasta hoy (2 de junio). En azul desde hoy hasta el final de la retrogradación (30 de junio), que es lo que te invito a observar especialmente. En verde el movimiento directo de Marte, antes y después de la retrogradación. Este último tramo también será interesante de observar.
El punto C corresponde al momento de la oposición. Los puntos A, B, D, y E se utilizan como referencia en otro gráfico más adelante.

En tus observaciones toma como referencia a la estrella Antares, y fíjate como va cambiando la distancia entre Marte y ella.

También puedes observar cómo cambia la forma del triángulo que ambos astros determinan junto con Saturno, la otra "estrella" brillante de la zona. El cambio del aspecto de este triángulo será incluso más fácil de apreciar en un primer vistazo sin necesidad de calibrar distancias. Pero cuidado, que éste, como todos los planetas, también se está moviendo, aunque sea muy levemente. Las posiciones de Saturno no están recogidas en el gráfico anterior.

Por cierto, creo que debo pedirle disculpas al sexto planeta porque parece que me olvidé de él en el anterior post al hablar de los actores de la escenificación. Fue solo porque creo que Saturno, aunque actúa, no es protagonista y porque con Ares y Antares quedaba el título redondo, sin añadir nada más. Pero habría que decir que Saturno, o Cronos como le llamaban los griegos, también tiene un papel importante y no es un mero espectador. Porque ¡también está retrogradando en estas fechas! Pero se mueve mucho más despacio como corresponde a un dios anciano tal como se representaba a Cronos en la mitología. Desde luego su retrogradación, mucho más corta en el espacio y mucho más lenta, no habría sido tan decisiva como la de Marte, ni mucho menos, para que Copérnico decidiera aclarar el tema.

Como compensación deberé dedicarle un artículo al sexto planeta próximamente. Porque aunque todo el mundo se olvida de ello, también Saturno tiene su oposición, precisamente mañana mismo, 3 de junio.

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AÑADIDO 18-6-16

Dos semanas después de publicar este post, lo edito para incluír un vídeo que acabo de encontrar. Tiene muchos años, la calidad es ínfima, pero es muy bonito y muy clarificador. Como la mayoría de los lectores del blog no volverán a leer este post y se perderán este vídeo, en alguna ocasión quizás lo vuelva a poner con otra excusa. Son poco más de 2 minutos, y en la última parte vas a ver retrogradar a Marte como nunca lo has visto. El tipo que se ve durante unos momentos llevando la cámara soy yo mismo, pero con 21 años menos.

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- Por qué ocurre la retrogradación

Como se entiende fácilmente en el ejemplo que se ha dado, cuando nuestro coche adelanta a otro y nos parece que éste retrocede, ocurre lo mismo con los planetas exteriores más lentos que la Tierra, en el momento en que los adelantamos.

También ocurre con Mercurio y Venus cuando éstos nos adelantan, aunque esta situación es diferente y ahora me limitaré a recoger el caso actual, concretamente el de Marte.

En el siguiente gráfico aparecen las posiciones concretas de los dos planetas en los lugares que han ido ocupando y ocuparán en estos meses cercanos al adelantamiento (la oposición de Marte de 2016)

Si prolongamos la visual a Marte sobre el fondo estrellado, se aprecia el cambio en el sentido de su movimiento aparente.

Aunque este gráfico se usa muy frecuentemente, hay que tener cuidado al interpretarlo porque no es tan evidente.

Incluso parece haber una contradicción si lo comparamos con el dibujo de la trayectoria de Marte que se puso antes, teniendo en cuenta que los lugares A, B, D, y E. coinciden en ambas representaciones como se puede comprobar en las fechas. Además en ambos casos las posiciones son rigurosas con la situación real.

Sin embargo en este último gráfico parece que la retrogradación ocupa un tramo proporcionalmente mucho más breve que en el otro, respecto al periodo completo de A a E.

Esto es porque el fondo estrellado de referencia sobre el que vemos la trayectoria aparente está infinitamente más lejos que lo que se ha trazado en este último gráfico, y lo que hay que analizar no es la posición de las líneas que nos marcan las visuales de la Tierra a Marte, sino su dirección. La línea de la posición A es paralela a la D y eso indica que en ambos casos veremos a Marte en lugares análogos respecto a las estrellas (En lugares con la misma "Ascensión Recta"). Si alargásemos enormemente estas rectas de las visuales hacia la izquierda, el tramo de retrogradación de B a D sería prácticamente igual que de A a E

En otras oposiciones de Marte, la retrogradación puede ser ligeramente diferente en duración y velocidad debido a que las órbitas de los dos planetas no son concéntricas y, especialmente en la de Marte, el Sol está relativamente lejos del centro.

Una aclaración:
Aunque a veces a mí también se me escapa, no me gusta decir como se oye siempre “debido a que la órbita de Marte es bastante excéntrica” porque aunque esa es la causa inicial de que el Sol no esté en el centro, lo cierto es que ambas órbitas son casi circulares, y el que no sean concéntricas es el motivo real (y así se ve y se entiende mejor) de la citada circunstancia y de otras, como que el  momento de la oposición no sea el punto ni momento central de la retrogradación o la tan mencionada diferente distancia de Marte en unas oposiciones y otras. Te aconsejo vivamente que leas esta entrada: "¿Tienes algo tan redondo como la órbita de la Tierra?" y  te olvidarás de esos dibujos de órbitas alargadas que son erróneos, y en vez de ayudar a entender las situaciones lo dificultan.

- Trayectorias de retrogradación

También las trayectorias que sigue Marte durante la retrogradación sobre el fondo estrellado pueden ser diferentes, debido a la inclinación de la órbita marciana respecto a la eclíptica.
La situación actual corresponde aproximadamente a la figura 1 del siguiente gráfico, pero en otros casos podría ser similar a cualquiera de las otras tres figuras.

En 2016, Marte ha pasado por el nodo descendente de su órbita durante la retrogradación y por ello toda la trayectoria va cada vez más hacia el sur (hacia abajo para los observadores del hemisferio Norte) (figura 1). 

Lo contrario ocurrirá por ejemplo en la oposición de diciembre de 2022 (figura 2). 
Pero si durante este periodo de retrogradación (aproximadamente 2 meses y medio aunque varía de unos casos a otros) el planeta rojo pasa por el punto de máxima latitud eclíptica (situado aproximadamente a mitad de camino después del nodo ascendente y antes del nodo descendente), la trayectoria primero irá hacia el Norte y luego hacia el Sur, con lo que se cerrará un bucle similar al de la figura 3, como sucedió en 2010. 
También habrá un bucle, pero redondeado por el Sur, con la oposición cerca del punto de mínima latitud eclíptica, como en 2003 en que fue similar a la figura 4.

- La “revolución” Copernicana y las acepciones de esta palabra.

En el sistema geocéntrico las retrogradaciones se explicaban mediante complicadas trayectorias circulares incrustadas en otras órbitas de los planetas alrededor de la Tierra. Los llamados epiciclos y deferentes, que sin una observación rigurosa podrían explicar aproximadamente la situación. 

Utilizando observaciones detalladas de las posiciones de Marte durante su retrogradación, Copérnico dedujo la nueva teoría, un sistema más sencillo que el anterior pero que exigía apartar la Tierra del centro del Universo. Algo realmente revolucionario en aquella época.

Aunque se sale del ámbito astronómico, éste puede ser un tema semántico muy curioso porque la palabra REVOLUCIÓN hoy en día tiene dos significados que aparentemente no tienen nada que ver entre sí.

La palabra Revolución, cuya acepción más usada actualmente es cambio brusco y violento, sobre todo en temas políticos y sociales, también significa “vuelta”, y así se usa habitualmente en el mundo del motor

Alguna vez he oído la opinión de que el significado más usado y conocido de esta palabra, como revuelta social en diferentes ámbitos, tuvo su origen precisamente en las consecuencias del trabajo del astrónomo polaco Copérnico.

Etimológicamente el término “revolución” procede del latín “revolutio” que originariamente parece que solo tenía el significado de “vuelta”.

Copérnico habló de las “revoluciones” de los planetas alrededor del Sol, utilizando esta palabra porque era el término técnico y de uso habitual en astronomía. El título de su decisiva obra era “Sobre la revolución de los orbes celestes“, en latín “De revolutionibus orbium coelestium”. Su nueva teoría supuso un cambio tan drástico respecto al antiguo sistema geocéntrico que dotó de un nuevo significado a esta palabra, según las referidas opiniones. 

El término “Revolución Copernicana” tan usado al referirse a este decisivo episodio en el conocimiento del Sistema Solar y en el cambio de paradigma filosófico respecto a la situación de nuestro planeta, podría contener los dos aspectos.

No soy filólogo y no he podido contrastar si originariamente el único significado de "revolución" fuese "vuelta". Pero el razonamiento parece totalmente lógico y tampoco he encontrado, aunque lo he buscado, ninguna referencia que lo contradiga, como sería la utilización literal de la primera acepción de esa palabra (cambio drástico) anteriormente al siglo XVI.

Si esta teoría fuese cierta, el fenómeno que estas semanas podemos ver en el cielo con Marte como protagonista, sería lo que habría aportado un significado nuevo, y el más usado hoy en día, a la palabra “revolución”.