Muchas
veces la gente me pregunta cómo los astrónomos conocemos con tanta precisión
y adelanto los detalles de los fenómenos celestes, e incluso yo en alguna ocasión he hecho una
broma en los preparativos de la observación de algún eclipse u ocultación: ¿Y
si los astros se confundiesen, cambian su camino o no se han enterado de lo que
tienen que hacer hoy, y nos quedamos sin ver nada especial?
¿Si Venus y
Júpiter, (Afrodita y Zeus para los antiguos griegos) personificaciones del dios
supremo y la diosa de la belleza, olvidaran que tenían una cita para
encontrarse el 27 de agosto de 2016, o si alguno de ellos hubiese cambiado de
planes por infidelidad o desdén y le diera plantón al otro?
Tal como estaba anunciado, Júpiter y Venus tuvieron un encuentro cercano. Imagen tomada con bastante Zoom para “separar” y quitar privacidad a los protagonistas. |
No hay
problema. Sabemos que esto no puede ocurrir, y lo único que nos puede impedir el disfrute de este tipo de espectáculos
es la presencia de las nubes.