Posiblemente recordarás la “gran
conjunción de Júpiter y Saturno” de diciembre de 2020 de la que tanto se habló.
Pues dentro de un mes tenemos otra conjunción, esta vez entre Venus y Júpiter,
que sin ninguna duda será mucho más llamativa.
21-12-2020 desde Bilbao |
Ésta, que podremos observar el 1
de mayo de 2022 de madrugada será mucho más vistosa que aquella, porque si
bien los encuentros de los dos planetas gigantes son interesantes por su rareza
(una cada 20 años) éstas lo son por su espectacularidad al verse muy próximos en el cielo los dos planetas
más brillantes. El enorme brillo de Venus, muchísimo mayor que el de Saturno, le
da realce y llama más la atención si está acompañado por Júpiter.
Como en estos encuentros
interviene Venus, que es un planeta interior (más cercano al Sol que la Tierra)
nunca serán visibles a medianoche, sino en los crepúsculos o momentos cercanos
y, también por ello, no será mucho el tiempo durante el que se puedan ver.
A pesar de ello, y en este caso exceptuando el tema de que hay que observar de madrugada, las condiciones serán
bastante favorables, ya que con una elongación de 43º, una hora antes de la
salida del Sol los dos planetas estarán a una altura de 7º para una latitud de
40º N (poco después de la 6 en la España peninsular), o nada menos que 29º para
una latitud de 35º Sur, aunque debido al gran brillo del segundo planeta
(magnitud -4), en cuanto aparezcan por el horizonte (si el cielo está limpio),
o media hora antes del amanecer, o incluso más tarde con la claridad de la
aurora todavía será visible y junto a él podrá buscarse el quinto planeta (con magnitud -2) y
observar la pareja.
Visto desde Europa aparecerán separados por solo unos 20´, menos que el tamaño angular con que vemos la Luna, con lo que será muy llamativo a simple vista
y como en la famosa conjunción de 2020 también en este caso se podrán observar simultáneamente en un telescopio de no
demasiada focal.
Pero además el espectáculo será interesante porque Marte y Saturno estarán situados en línea con los dos protagonistas, y sin duda completarán una bonita estampa, sobre un fondo con las llamativas constelaciones de Capricornio, Sagitario y Escorpio en su mejor ubicación.
La aparición aún en plena noche del cuarto y sexto planeta, que actuarán de comparsas y teloneros, nos anunciarán que la salida de los protagonistas está próxima.
Situación el 1-5-2022 para una latitud media del hemisferio norte (37º). Para lugares más meridionales será mucho mejor y lo recogeré con más detalle en un próximo artículo. |
Las conjunciones entre Venus y Júpiter son mucho más frecuentes que las de Júpiter y Saturno, porque como Júpiter
es un planeta lento y por ello cada 13 meses pasa de frente del Sol (conjunción
con el Sol) antes o después de este paso se encontrará con Venus que nunca se
aleja mucho del astro rey. Pero por ello
tienen el problema de que no se podrá observar si la elongación de Venus (su
separación angular con el Sol) cuando eso ocurra no es elevada.
Esto queda de manifiesto en la
siguiente tabla, que junto a la de este año, recoge las 5 conjunciones
anteriores y posteriores, donde se aprecia que las condiciones en este caso son
muy buenas.
La separación angular entre los dos astros es el parámetro más determinante del interés de la conjunción, y será mejor cuanto más pequeña sea esa separación.
La elongación nos determinará su facilidad de observación y el tiempo durante el que los planetas serán visibles, cuanto más grande mejor, aunque esto está condicionado por la estación en que ocurra y el hemisferio desde el que se observe.
Finalmente la fase de Venus es importante solamente si observamos por el telescopio, y cuanto menor sea el porcentaje más grande se verá el planeta, más estrecha la fase y atractiva la imagen sobre todo si, como ya se ha mencionado, en este caso se puede ver simultáneamente con Júpiter y sus satélites a través del ocular de un telescopio.
A partir de los datos de la tabla se pueden sacar varias conclusiones, que las recojo a continuación en el adjunto, porque aparecen algunos temas técnicos.
- Fechas: Tal como se ha dicho, estas conjunciones se producen con un promedio de 13 meses de diferencia, aunque puede variar aproximadamente entre 10 meses si la primera elongación es occidental y la segunda oriental (porque ocurrirá la primera después de la conjunción con el Sol y la segunda antes de la misma) o 15 en la situación contraria.
- Elongación: La de este año será muy favorable de cara a su observación, porque se da la segunda mayor elongación de toda la lista (43º), aunque podría llegar a 46.
De todas formas para el
hemisferio norte la situación no es todo lo buena que pudiera ser, pero para el
sur es magnífica.
- También el dato de la
separación de los planetas es muy bueno. Con poco más de 20´ (en un próximo artículo se
matizará según la zona de observación) es el mejor excepto la de 2024 que no se
verá por la pequeña elongación, y la de 2016 que también fue más pequeña que
ésta.
En una conjunción planetaria
siempre hay un momento en que uno de los planetas “adelanta al otro” y tienen
la misma ascensión recta, o la misma longitud eclíptica. Pero no aparecen en el
mismo punto del cielo porque las diferentes inclinaciones orbitales, aunque no
muy pronunciadas hacen que uno se sitúe “por encima” del otro, con diferente
latitud eclíptica.
En este caso, tanto Júpiter como
Venus están al Sur de la eclíptica, y el de órbita más grande (y menor inclinación), más alejado del nodo descendente. Ello hace que se vean muy próximos.
- De cara a la observación telescópica otro dato positivo es la fase de Venus que hará más atractiva la imagen. Aunque no es demasiado fina (iluminado un 68%) se apreciará claramente dicha fase, y será la segunda mejor de toda esta serie, después de la de enero de 2019 cuando no se pudieron observar a la vez ambos planetas por un telescopio por su elevada separación de más de 2º.
Fase aproximada de Venus ese día, y tramo de su órbita (respecto a la posición de la Tierra) en que la fase sería menor que un 68% |
En definitiva, todos los parámetros indican que estamos ante una de las mejores conjunciones Venus-Júpiter que desde luego merecerán un madrugón para poder observarla.
Además el preámbulo en los días anteriores merecerá la pena porque pasará por allí la Luna menguante entre el 24 y el 27, pero sobre todo éste último día. Además nos permitirá controlar el lugar y las condiciones de observación:
La danza de la Luna y los 4 planetas será digna de verse y permitirán seguir la continua aproximación de Venus y Júpiter |
Durante estos días los protagonistas ya están tomando posiciones y ofreciendo espectáculo (te sugiero linkar el enlace si no viste "Coreografía planetaria") y el pasado lunes pude obtener una de las escenas a pesar de la calima:
Anuncio ahora la conjunción, cuando todavía falta un mes, porque el fenómeno merece la pena y quizás haya que ir haciendo planes o adecuando horarios de trabajo para la observación.
Cuando queden pocos días ampliaré el tema con otro artículo que contenga algunos detalles más, consejos de última hora, e incluiré un curioso dato sobre la fecha real de la
conjunción.